Puente del Rey
El Puente del Rey es el puente sobre el río Garona que conecta la Vall d’Aran con los Pirineos franceses, concretamente el departamento de Alta Garona.
Este paso fronterizo fue utilizado por muchos republicanos que huían de la Guerra Civil Española, y posteriormente por miles de judíos que escapaban de la ocupación nazi de Francia. Quienes lograban escapar cruzaban los collados de las montañas de los Pirineos desafiando la vigilancia a ambos lados de la frontera, las condiciones climáticas, las nieves perpetuas y la dureza del recorrido.
La Vall d’Aran fue una de las principales vías de llegada de refugiados procedentes de Alta Garona y Arieja, llegados de países de toda Europa (Alemania, Austria, Polonia, Holanda, Bélgica o Francia). Para ingresar allí, era necesario pasar el control aduanero de Pont de Rei. Luego partían hacia Barcelona, donde salían los barcos que los llevarían al país al que querían emigrar.
Las presiones alemanas llevaron a que desde mediados de 1940, el régimen solo aceptara a los exiliados con pasaporte y visa de entrada. A partir de entonces, las evasiones se realizaban a través de los caminos de montaña, y muchos de los detenidos fueron expulsados a Francia, a través de Pont de Rei. La mayoría de los recién llegados eran capturados y trasladados a la prisión de Vielha y luego conducidos a las prisiones de la ciudad de Lleida. Otros fueron alojados en hoteles de Les y Vielha. Para todos ellos, los Pirineos de Lleida fueron la penúltima frontera antes de alcanzar su libertad.
En 1944, el paso fue el punto de entrada y retirada de las fuerzas antifranquistas durante la fallida invasión de la Vall d’Aran.
Cerca del Pont de Rei, podemos encontrar pueblos muy bonitos como Canejan o Bausen.