Calella de Palafrugell, icono de la Costa Brava
El núcleo urbano de Calella forma parte del municipio de Palafrugell, ubicado en el Baix Empordà. Es uno de los pocos de toda la Costa Brava que aún mantiene su encanto original.
Este antiguo pueblo de pescadores, es conocido por sus calles estrechas y casas blancas con contraventanas de tonalidades verdes y azules. Está perfectamente integrado en el paisaje salvaje, típico de esta zona del litoral catalán; rodeado de pinos y rocas.
Qué ver
Una vez lleguéis a la localidad, os recomendamos caminar hasta el conjunto histórico del Port Bo y les Voltes, una calle con mucho encanto, donde encontraréis las encantadoras casas de pescadores de antaño. Actualmente, los bajos de estas casas albergan algunos de los restaurantes más populares de Calella.
A partir de aquí, podéis continuar por alguno de los diversos callejones del núcleo antiguo, como por ejemplo, la calle de la Gravina, y acercaros hasta la iglesia de Sant Pere, de finales del siglo XIX, donde podréis admirar el emblemático reloj de su campanario.
Entre las construcciones más pintorescas del pueblo, destacan la Casa Rocamora, situada en un terreno rocoso; la Casa Verdaguer, de finales del s. XIX, y la Casa Sagrera, que presenta una estética neoclásica.
Por su parte, el paseo del Canadell, ubicado al norte de la playa de Port Bo, aglutina una serie de casas de estilos bastante diferentes entre sí, pero que en conjunto, crean una armoniosa combinación.
Además, en la playa del Canadell, podréis ver otra de las construcciones más características de la población costera; los guarda botes, una especie de sótanos con puertas de diferentes colores que, antiguamente, servían para guardar las barcas y el material de los pescadores.
Actualmente, en la mayoría de estos «trasteros» se han establecido bares y restaurantes, o bien, son propiedad de particulares.
Desde el mirador de Manel Juanola i Reixach, farmacéutico de Palafrugell y conocido por ser el inventor de las pastillas Juanola, tendréis una vista panorámica de la playa del Canadell y del Port Bo.
Otro de los miradores y, de hecho, el que ofrece las mejores vistas del pueblo en conjunto, es el que se ubica en la Punta de los Burricaires, entre la playa del Pelegrí y la cala de la Platgeta.
Finalmente, al sur de la localidad, dentro del Espacio Natural Protegido de Castell-Cap Roig, se encuentran los famosos jardines de Cap Roig. Desde este encantador jardín botánico, disfrutaréis de unas vistas espléndidas del litoral más auténtico de la Costa Brava.
Qué hacer
Aparte de sus playas y calas, Calella también es un muy buen destino para los amantes del snorkel y el buceo, ya que encontraréis una abundante fauna marina.
Las playas más concurridas son la playa de Port Pelegrí, la de La Platgeta, la del Canadell, y la del Golfet; a la cual se accede a través del camino de ronda.
Os animamos a hacer algún tramo del camino de ronda, ya que, específicamente, en esta zona de la Costa Brava, las vistas son espectaculares. Dando un paseo, podréis llegar a las localidades vecinas de Llafranc y el cap Roig.
Una última propuesta que queremos hacerles es visitar la costa que recorre Calella y sus localidades vecinas en kayak. Podéis alquilar tanto en la playa del Canadell como en la del Port Pelegrí. Es una experiencia muy divertida tanto para grandes como pequeños, y una alternativa que os permitirá llegar a las calas menos concurridas.
Gastronomía
La cocina empordanesa es conocida por sus propuestas culinarias únicas y sabrosas, aprovechando los incomparables recursos de su entorno más cercano; los mejores productos de la tierra y del mar. No faltan la paella, el arroz caldoso, el suquet de pescado…
Sin embargo, uno de los platos tradicionales palafruguellenses; antiguamente, solo disponible durante la Cuaresma, es el conocido como «Es Niu». Consiste en una mezcla hecha a base de tripa de bacalao, huevo duro, pescado seco y patata. Con el tiempo han aparecido variaciones de la receta, por ejemplo, añadiendo sepia, aves de caza, o salchichas.
Concretamente, si visitáis Calella de Palafrugell en invierno, os recomendamos hacer una garoinada, es decir, probar un plato de erizos recién cogidos del mar. ¡Una experiencia que no deja a nadie indiferente!
Dónde comer
Calella de Palafrugell cuenta con una oferta gastronómica bastante amplia. Encontraréis establecimientos especializados en la cocina tradicional de la zona, pero también hay representación de otros tipos de cocina.
Podéis consultar todos los restaurantes de Palafrugell en Guiacat.
Dónde dormir
Alojarse en un pueblo tan pintoresco y encantador como Calella es una experiencia única. Su núcleo histórico, con calles de losas de piedra lisa, y decoradas con buganvillas, son la expresión más auténtica de esta área del Mediterráneo. ¡Déjense maravillar por este antiguo pueblo de pescadores!
Puedes encontrar todos los alojamientos rurales de la Costa Brava en Guiacat.
Fiestas
Algunos de los eventos más conocidos del municipio costero son: la Fiesta Mayor, que tiene lugar el 29 de junio, y a continuación, el primer sábado de julio, se celebra la célebre Cantada de Habaneras.
Si os gusta la música en vivo, y tenéis la oportunidad, entre los meses de julio y agosto, os recomendamos ir al Festival de Cap Roig.
Podéis consultar todas las actividades que se hacen en Calella de Palafrugell a lo largo del año en la agenda de Cataluña Turisme.
Mejor momento para visitar
El encanto particular de Calella se mantiene durante todo el año, ya que las temperaturas se mantienen moderadas y, realmente, en cada estación, la belleza de su paisaje es digna de una postal.
Sin embargo, si lo que buscáis es disfrutar de las playas y calas que tiene para ofrecer la Costa Brava, entonces, la mejor época es el verano. Eso sí, tened en cuenta que el mes de agosto es el más concurrido, turísticamente hablando.
Imprescindibles
A continuación os dejamos nuestra recomendación con los lugares que no os podéis perder en vuestra visita a Calella, donde podréis impregnaros de la auténtica esencia de la Costa Brava.
- Playas y calas
- Núcleo antiguo y contemplar el mar desde las Voltes
- Camino de Ronda
- Jardines de Cap Roig
- Punta de los Burricaires (el mejor mirador de Calella)
Qué ver cerca
En Palafrugell tenéis al alcance tres lugares considerados bienes culturales de interés nacional. Por un lado, los monumentos históricos de la torre de vigilancia San Sebastián; la más antigua del municipio, y la torre de Can Mario. Y, por otro, el conjunto histórico del Port Bo de Calella.
La iglesia parroquial de San Martín, situada en Palafrugell, y formada por diferentes elementos arquitectónicos que datan del siglo XV-XVIII.
También podéis visitar el Museo del Corcho de Cataluña (en Palafrugell), o el Espacio de Arte Contemporáneo Can Mario (Fundación Vila Casas). Asimismo, el municipio también acoge la Fundación Josep Pla, célebre escritor catalán, enamorado del Empordà.
Si os apetece explorar un poco más el paraje natural de los alrededores, en Llafranc, encontraréis el dolmen de Can Mina de los Torrents, y en la montaña de San Sebastián; el Poblado Ibérico de San Sebastián de la Guarda.
Otras poblaciones cercanas a Calella son: Palamós, Vall-llobrega, Tamariu, Regencós, y Begur.
Cómo llegar
Si vais en coche desde el sur, debéis tomar la autopista A-7 en dirección Girona/Francia, para luego tomar la salida 9 (Vidreres / Lloret) y continuar en dirección San Feliu de Guíxols y Playa de Aro por la C-35. A partir de ahí, seguir en dirección Palamós (C-31) y tomar la salida 331 Palafrugell Sur.
Si venís del norte, coged la autopista A-7 en dirección Barcelona y tomad la salida 6 (Girona Norte), en dirección la Bisbal / Palamós (C-66). Finalmente, coged la salida Palafrugell Norte.
Además, la compañía de autobuses Sarfa realiza el trayecto entre Palafrugell y las poblaciones cercanas. Podéis consultar los precios y horarios en su página web.
En el caso de que optéis por tomar el tren, la estación más cercana a Palafrugell es la de Flaçà. Una vez allí, tomad un autobús de la compañía Sarfa para ir hasta Palafrugell.
